La diva del pop lanza una nueva línea en su marca de belleza dedicada al cuerpo poniendo el suyo como imagen. Pero no todo el mundo tiene unas curvas como las de Jennifer Lopez, a las que dedica mucho esfuerzo.
Ya sea por amor a sí misma o por la influencia de la imagen en la industria donde trabaja, la cuestión es que Jennifer Lopez dedica mucho esfuerzo a trabajar su cuerpo.
Ese físico tan alabado en todo el mundo ha sumado un dígito más este verano. Ya son 53 primaveras las que tiene la artista y, como si de un caso de absoluta excepcionalidad se tratara, su cuerpo se ve cada día mejor.
Tonificado, fuerte y sano, pero también espectacular y magnífico, porque, no nos engañemos, lo que más impacta (o, al menos, a primera vista) es la imagen estética de la artista.
Se menosprecian los beneficios ocultos tras ese físico y, en realidad, es lo verdaderamente importante.C
ONFIANZA Y SEGURIDAD
Nadie tiene un cuerpo como el suyo ni puede pretender tenerlo.
JLo Body, su nueva línea de belleza dedicada al cuerpo, ha salido al mercado con cuatro productos: una crema de noche, un limpiador, un sérum y un bálsamo específico para glúteos (FIRM + FLAUNT Targeted Booty Balm).
El mensaje que lanza su creadora es que lo más importante es sentirte segura en tu propia piel: "Para mí, se trata de sentirte segura en tu piel, pase lo que pase", afirma Jennifer Lopez.
Hoy sus glúteos se encuentran dentro de los parámetros de belleza que se adoran en la cultura de la imagen que vivimos inmersos, pero en su día esa parte de su fisionomía era motivo constante de análisis.
Ciertamente su cuerpo no es un gran ejemplo de diversidad corporal, pero su mensaje siempre se ha enfocado a una filosofía body positive.
Y aunque se puede considerar que su imagen perpetúa los estándares de belleza clásicos, ella insiste en que su cuidado no se basa en la estética sino puramente en el bienestar y la salud.
"Creo que la idea de ser curvy, ser más grande o más pequeña de lo normal... no importa. Mientras tengas salud, lo importante es quererte", explica Jennifer Lopez.
AL GIMNASIO TODOS LOS DÍAS
Para mantenerse fuerte, no hay día que no vaya al gimnasio.
Cada mañana, incluyendo los días de vacaciones y festivos, la artista hace una sesión fitness.
Incluso realiza una rutina que le sirve de calentamiento antes de sus conciertos, también porque le ayuda a mejorar su concentración sobre el escenario.
Al contrario de lo que todo el mundo presupone de un esfuerzo así antes de cantar y bailar durante casi dos horas, la artista se motiva y se llena de energía. ¿Acaso no es una forma explícita de demostrar qué consideración tiene Jennifer Lopez sobre el esfuerzo?
"A primera vista, la mayoría de la gente ve un hermoso cuerpo.
Yo veo una increíble ética de trabajo, disciplina y sacrificio", dice su entrenador Dodd Romero. "Su cuerpo se ha vuelto más esbelto y firme pero tiene el doble de fuerza. Es evidente que el esfuerzo merece la pena".
"Aunque a veces me cuesta, rara vez me escaqueo", dice JLo sobre el gimnasio. En ese lugar la hemos visto disfrutar y sudar a partes iguales porque así lo ha compartido a través de las redes sociales con sus seguidores.
CERO EXCESOS, NADA DE PROCESADOS
Sin una alimentación ordenada sería imposible que su cuerpo se mantuviese saludable.
La artista tiene varios dogmas a la hora de comer que, en raras ocasiones se salta porque cuando lo hace no se siente bien. Nada de alcohol ni cafeína. Tampoco soporta la comida procesada ni el exceso de azúcares.
Tiene restringido el uso de sal (cuanta menos cantidad se añada a sus comidas, mejor) y concede a las proteínas (animales y vegetales) la gracia de ser el eje de su alimentación: yogur, huevos, legumbres, carne y pescado que siempre están presentes (de una u otra forma) en su menú.
Y si, de vez en cuando se salta sus propias normas, se marca un día en el calendario y se come unos cuantos tacos juntos a sus o se toma una copa de champán para celebrar el amor junto a su recién estrenado esposo porque la clave está en la mesura, es saber disfrutar de todo tipo de alimentos sin abusar y sin excesos.